LA SANTA MISA DIARIA.



30 DE ENERO. SANTA MARTINA, VIRGEN Y MARTIR.

SANTORAL:

Del Martirologio Romano del 1 de Enero:
"En Roma la pasión de Santa Martina, Virgen y Mártir, que, bajo el Emperador Alejandro, atormentada con diversas clases de suplicios, finalmente, golpeada con la espada, adquirió la Palma del Martirio. 
Su Fiesta , sin embargo, se celebra el día treinta del mes en curso ."  

TEXTOS DE LA SANTA MISA.

INTROITO:
Sal 118:46-47.

V/. Hablé de tus testimonios delante de los reyes y no me avergoncé: medité en tus mandamientos, a los cuales amé mucho.
R/. Sal 118:1. Bienaventurados los hombres de recta conducta que caminan en la Ley del Señor.
Gloria.

GLORIA:

COLECTA:

Oremos.
Oh Dios, que entre las otras maravillas de tu Poder realizaste también la de dar al frágil sexo la Fuerza del Martirio; Nosotros, que celebramos el aniversario de la Bienaventurada Martina, tu Virgen y Mártir, te pedimos nos concedas que imitemos sus ejemplos y avancemos asi hacia Ti. 
Por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la Unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

EPISTOLA:
Ecclo. 51:1-8; 51:12.

Léctio libri Sapiéntiæ.

"Te glorificaré, Señor mi Rey, y te alabaré, Dios mi Salvador. 
Glorificaré tu Nombre, porque has sido mi ayuda y protector; has librado mi cuerpo de la perdición, del lazo de la lengua malvada, de los labios de los mentirosos; has sido mi ayuda frente a mis enemigos. 
Según tu gran Misericordia, de la que tomas tu Nombre, me libraste de los leones que rugían dispuestos a devorarme, de las manos de los que querían mi alma, de las tribulaciones que me rodeaban, de la llama poderosa que me había envuelto.
No me quemé en medio del fuego. Me has librado de las profundidades del infierno, de la lengua inmunda, de los testimonios mentirosos, de un Rey injusto y de una lengua injusta. Mi alma te alabará hasta la muerte porque liberas a los que en Ti esperan y los salvas del poder de las naciones, Señor Dios nuestro.
(Deo Gratias)

GRADUAL:
Sal 44:8.

V/. Amaste la justicia y odiaste la iniquidad.
R/. Por esto Dios, vuestro Dios, os ha ungido con óleo de alegría.

ALELUYA:
Sal 44:15, 16.

Aleluya, aleluya
Después de ella serán presentadas las vírgenes al Rey: sus compañeras serán llevadas ante vosotros con alegría. Aleluya.

EVANGELIO:
Mateo 25:1-13.

Sequentia ☩ Sancti Evangélii secúndum Matthaeum.

Gloria Tibi Domine.

"En aquel tiempo, Jesús contó a sus discípulos esta parábola: 
«El Reino de los Cielos se parece a diez vírgenes que tomando sus lámparas y salieron al encuentro del novio y de la novia. 
Pero cinco de ellos fueron necias y cinco prudentes. 
Las cinco mujeres insensatas, al tomar las lámparas, no llevaron consigo el aceite; pero las prudentes, junto con las lámparas, tomaron también el aceite en sus vasijas. Como el novio tardó en llegar, todos se adormilaron y se quedaron dormidos. 
Pero a medianoche se oyó un clamor: "He aquí que viene el esposo: salid a recibirlo". 
Entonces todas las vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas. Y las insensatas dijeron a las prudentes: 
“Dadnos un poco de vuestro aceite, que nuestras lámparas están a punto de apagarse”. 
Las prudentes respondieron diciendo: 
"No sería suficiente para nosotrois ni para ustedes: 
vayan más bien a la tienda y compren algo para ustedes mismas". 
Mientras iban, llegó el Novio; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas, y se cerró la puerta. 
En el último momento llegaron también las otras vírgenes y comenzaron a decir: 
"Señor, señor, ábrenos". 
Pero él respondió desde dentro diciendo: 
"En verdad os digo que no os conozco". 
Por tanto, estad alerta, porque no sabéis ni el día ni la hora.
Laus Tibi Christe.

OFERTORIO:
Sal 44:15; 44:16.

Después de ella, las demás vírgenes serán conducidas al Rey: sus compañeras serán conducidas ante ella con alegría y alborozo: serán conducidas al templo del Señor Rey.

SECRETA:

Oremos.
Acepta, oh Señor, los Dones que te ofrecemos en la Fiesta de Santa Martina, tu Virgen y Mártir, por cuyo Patrocinio confiamos ser liberados, de nuestros males.
Por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la Unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

COMUNIÓN:
Sal 118:78; 118:80

Sean avergonzados los soberbios, porque han cometido iniquidad contra mí; porque yo practiqué tus Mandamientos y vuestra justicia, para no ser avergonzada.

POSTCOMUNION:

Oremos
Que los Misterios que hemos recibido, oh Señor, nos ayuden y, por intercesión de Santa Martina, tu Virgen y Mártir, nos hagan gozar de protección Eterna. 
Por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que es Dios, y vive y reina contigo, en la Unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.

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